APOSTASIA DE LOS
ULTIMOS TIEMPOS
1 Parte
1 Parte
Aptl. Dr. Jose Zapico
¿Estará Dios ilegal
en la Tierra, como muchos están hoy enseñando?
Jeremías 23:23-34
¿Soy yo Dios de
cerca solamente, dice Jehová, y no Dios de lejos? ¿Se ocultará alguno, dice Jehová, en
escondrijos donde yo no lo vea? ¿No lleno yo, dice Jehová, el cielo y la
tierra?
En estos tiempos
actuales se ha estado propagando una enseñanza completamente herética, que es
una ramificación mas de la apostasía generalizada de estos días, que sin duda
alguna esta confundiendo a miles de cristianos, donde a viva voz se esta
diciendo que Dios no puede hacer nada en la tierra porque está ilegal y que por
lo tanto necesita que el propio hombre
le conceda el permiso legal para poder manifestarse y obrar en ella.
Es sumamente
preocupante y a la vez peligroso, todas las veces que se piensa que no se
debería dar mucha atención, sin embargo todo esto da ha entender que cada día
es mas fuerte la influencia de la ignorancia bíblica, a consecuencia que son
miles de cristianos que no escrudiñan las sagradas escrituras y son llevados
como la onda de la mar de un lado a otro.
Los verdaderos y
genuinos siervos de Dios deben responsablemente discernir el error y el engaño
y denunciarlo abiertamente, levantando una voz de alerta al pueblo de Dios
contra tal seudo-enseñanzas, si esto no se hace serán muchos los que caerán atrapados en la red y trampa
del engaño.
Es muy común y
normal en los tiempos actuales que vivimos que muchos sean los que declaren que
hoy se vive en un tiempo de una nueva revelación bíblica, acompañada de una nueva
reforma, anulando por completo todo lo que se ha enseñado bíblica y
escrituralmente a través de los años.
Dentro del marco de
esas nuevas enseñanzas, existen por consiguiente un desenfreno, de muchas
falsas afirmaciones que no tienen para nada ningún fundamento bíblico, solo son
supuesta teorías basadas de argumentos propios y humanos, pero que están
haciendo mucho mal a gran parte del pueblo de Dios en el mundo entero.
Permíteme compartir contigo uno de estos desvió heréticos que dicen lo siguiente:
Dios está limitado por su
palabra, diciendo Dios es soberano hasta que abre la boca; cuando Dios habla, Dios deja de ser soberano
porque tiene que atarse así mismo a la palabra que ha hablado.”
Génesis 1:26 Dios declaró
al hacer al hombre: hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza y que tenga
dominio sobre la tierra.
Dios es un ser
espiritual, por eso, está ilegal en la tierra y no puede hacer nada que el
hombre, quien sí está legalmente, no le de permiso para hacer ya que el dio al
hombre dominio’ sobre la tierra.
Como Dios no tiene ese
dominio, el depende del permiso del hombre, por lo tanto, si algo ha de ser
hecho en la tierra, tiene que ser hecho por un espíritu con un cuerpo; y si el
hombre no le da permiso a Dios, él no puede hacer nada porque es ilegal que él
lo haga.
Es tal el desvío de este
tipo de enseñanza, que se atreven a decir que Dios le pidió a María que le
prestara su vientre para que Jesús naciera y fuese de esa manera legal en la
tierra y que después que Dios recibió el permiso de María, entonces pudo entrar
a su cuerpo.
Aun describen a Cristo
teniendo una conversación con el diablo en el infierno, en la cual el diablo se
sorprende al ver al espíritu de Cristo viniendo ante él y le dice que está
ilegal, a lo que Cristo responde, yo estoy legal porque el cuerpo de Jesús esta
muerto allá arriba, y de esa manera, Cristo entonces llega hasta donde está el
diablo y le quita las llaves de la muerte, el hades y el infierno al diablo
ante la presencia de todos los demonios, esto no es lo que dice la Biblia, todo
esto carece del verdadero fundamento de las sagradas escrituras.
Por otro lado Ellos
presentan la oración como un permiso que se le otorga a Dios
Mi Pregunta a todo
esto es ¿De verdad Dios necesita de un permiso especial del hombre para
manifestarse y actuar en la tierra?
La creencia del
permiso dado a Dios por medio de la oración, es como abiertamente lo declaran,
que Dios está limitado y la oración fue creada a causa de la limitación de la
palabra de Dios.
.
Hasta se llega a decir
que Dios es soberano hasta que habla, pero cuando el habla, el se atrapa a sí
mismo por lo que dice y por eso es que Dios no habla mucho.
Cuando el habla su
soberanía se hace limitada por su palabra. La oración fue creada por la limitación
de la palabra de Dios.
Aun se atreven a decir
que Dios no te usa porque tu eres puro, sino que El te usa porque él está
atrapado. Lo cual quieren destacar que Dios no puede intervenir en la tierra
sin un humano.
Cuando Dios se
encuentra con Abraham es El tomando la iniciativa de buscar permiso de parte de
Abraham para destruir Sodoma y Gomorra, entonces la comunicación de parte de
Dios comienza de la manera siguiente según ellos:
“Abraham, voy a destruir
a Sodoma y Gomorra, la cual el le pregunta ¿porqué vienes a mí?” y Dios le
contesta “necesito un humano, necesito alguien que me de permiso”, y Abraham
hizo un negocio con Dios y siguieron negociando y Dios tuvo que cooperar con el
negocio y Abraham le dijo “esta bien Señor es suficiente ve y destrúyeles y
Dios dijo muchas gracias y los destruyó.” No es esto algo absurdo y sin fundamento
bíblico.
Lo mismo hablan
cuando se refieren a la historia de Moisés:
“Dios dijo Moisés he
escuchado el clamor de mi pueblo y he venido a liberarlos,” y Moisés le
pregunta, ¿Porque vienes a mi?” Y él dice “porque tú eres hombre Moisés y
necesito permiso.
Otro punto que
mencionan es lo siguiente:
La sanidad física es para
ayudar a Dios. Tu cuerpo es la cosa más importante para Dios… de hecho, Dios
está tan comprometido con tu cuerpo que ha provisto un programa llamado
sanidad.
Dios te va a sanar porque
él necesita tu cuerpo no porque él le quiere hacer sentir mejor, tu no entiendes
la sanidad.
Digo que Dios le va
restaurar físicamente no porque él quiere que usted se sienta bien sino porque
él necesita el cuerpo en el que usted vive…
Dios no quiere sanarte para que tu te sientas bien, el quiere sanarte porque
el necesita tu cuerpo, él te va a sanar por amor a sí mismo. Dígale a Dios, sáname porque tú necesitas mi
cuerpo. Tu ves, Dios es un espíritu y el
está ilegal aquí sin un cuerpo.
¿Ahora qué es lo que
dice verdaderamente la Biblia?
Sin duda, lo que la
Biblia enseña es diametralmente opuesto a lo que se dice por medio de esta
falsa enseñanza.
Hay varios puntos
que debo de poner en claro a la luz de las sagradas escrituras, para poder
entender todo esto desde una perspectiva totalmente bíblica en cuanto al tema
que estoy abordando.
Lo primero que se
detecta en esta falsa enseñanza es que no se tiene la mas mínima idea y
conocimiento acerca de lo que es la soberanía de Dios, menos de lo que
representa y significa la oración, tampoco que es la enfermedad y la sanidad,
cual es el la responsabilidad del hombre desde la perspectiva divina y si Dios
necesita o no necesita permiso humano.
Es sin lugar a duda
que todo esto lo que intenta sutilmente es de distorsionar el concepto de la
Soberanía de Dios, lo presentan como una forma de pensamiento tal que al
considerar la soberanía de Dios de esta manera, la gente no vea razón alguna
para pasar tiempo orando y buscando a Dios.
En este tipo de
seudo-enseñanza determinan lo siguiente
en torno a lo que ellos consideran como base para entender correctamente la
soberanía de Dios:
a. Dios es tan soberano como su palabra
b. Dios está limitado por su palabra
c. Dios nunca violará su palabra
Esto, podría ser
correcto si la explicación dada fuese la correcta, pero no lo sería si es mal
interpretado como lo están haciendo.
Quiero que observes
el primer punto en cuanto a lo de la soberanía de Dios.
¿Dios es tan soberano como su palabra?
Primeramente, quieren
decir textualmente que la soberanía de Dios termina cuando Dios
abre la boca. Esto por supuesto es un gran error por no llamarlo mejor una gran
herejía.
La Biblia señala a
Dios como el que tiene la última palabra, y cuando El habla establece’ su
soberanía de tal manera que nadie puede ir en contra de su propia palabra que
el mismo ha establecido, es decir, la
palabra de Dios no es para limitar a Dios sino para limitar su creación como
máxima autoridad sobre ella, por lo tanto cuando Dios habla no limita su
soberanía sino que la afirma y la confirma.
La idea de que Dios
hable algo de esa manera afirma que ha de cumplir irrevocablemente lo que ha
dicho, por eso es Dios. La soberanía implica que El hace todo lo que quiere en
los cielos y la tierra y eso incluye lo que el habla.
El mismo declara por
medio de su propia Palabra lo siguiente:
Salmos 135:6
Todo lo que Jehová
quiere, lo hace, en los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.
Hebreos 6:16-20
Los hombres ciertamente juran por uno mayor que
ellos, y para ellos el fin de toda
controversia es el juramento para confirmación. Por lo cual, queriendo Dios mostrar más abundantemente a
los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento, para que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios
mienta, tengamos un fortísimo consuelo
los que hemos acudido para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros. La cual tenemos como segura y firme ancla del
alma, y que penetra hasta dentro del
velo, donde Jesús entró por nosotros como precursor, hecho Sumo sacerdote para siempre según el
orden de Melquisedec.
La palabra de Dios
expresa Su querer y al hacerlo afirma su soberanía.
Cuando estudias la
Biblia, te darás cuenta que el nombre de alguien por lo general va fuertemente
conectado al propósito o carácter de esa persona. Cuando se trata de Dios es
innegablemente el mismo concepto.
El declaro a Moisés
que su nombre era “YHWH” (Jehová), que significa YO SOY, dando a entender que
era autosuficiente sin necesidad de nada.
Otros nombres de
Dios en la Biblia expresan verdades sobre El. Por ejemplo Jesús significa Salvador
o Jehová Salva, eso indica que en la persona de Jesús hallamos salvación. Cuando
Dios habla, su palabra es una expresión de su voluntad y por lo tanto el hablar
de Dios expresa su carácter.
Es por eso que el
Salmista dice que la palabra de Dios es conforme a su nombre. Dios no habla por
hablar y lo que dice expresa su persona, su carácter, su poder, su magnificencia,
su voluntad y su soberanía misma.
Salmo 138:2
Me postraré hacia tu
santo templo, y daré gracias a tu nombre por tu misericordia y tu fidelidad;
porque has engrandecido tu palabra conforme a todo tu nombre.
¿Dios está limitado por su Palabra?
Dios no puede hablar
y enredarse o limitarse a sí mismo como uno que no tiene control sobre sus
palabras y que habla a la ligera.
Eclesiastés 5:2-7
No te des prisa a
abrir tu boca, ni tu corazón se apresure
a proferir palabra delante de Dios,
porque Dios está en el cielo, y
tú sobre la tierra. Sean, por tanto,
pocas tus palabras. 3 Porque de
las muchas ocupaciones vienen los sueños,
y de la multitud de palabras la voz del necio. 4 Cuando a Dios hagas promesa, no tardes en cumplirla, porque él no se complace en los
insensatos. Cumple lo que prometes.
5 Mejor es no prometer que prometer y no
cumplir. 6 No dejes que tu boca te haga
pecar, ni delante del ángel digas que
fue por ignorancia. ¿Por qué hacer que
Dios se enoje a causa de tus palabras y destruya la obra de tus manos? 7
Pues, donde abundan los sueños
abundan también las vanidades y las muchas palabras. Pero tú,
teme a Dios.
En segundo lugar,
decir que Dios “está limitado por su palabra” como fin de condicionar y poner
parámetros a Dios es simplemente presentar a Dios como un ser imperfecto que al
abrir la boca se ha equivocado; como alguien que habla a la ligera sin
considerar las consecuencias de lo que está diciendo y es por esa razón que que dicen “por eso
Dios no habla mucho”.
¿Significa acaso que
entonces Dios a sabiendas se propuso limitarse el mismo, dejando de tener
control absoluto como Dios para quedar a merced de sus criaturas?
Si es eso hubiera
sido así, entonces el hombre es convertido en Dios y dejaría a Dios a la merced
de su creación, que de paso, debemos recordar, que está bajo pecado.
¿Dios no viola su Palabra?
Hay dos formas en
que Dios habla, condicionalmente e incondicionalmente. La palabra de Dios
condicional puede ser revocada, sin embargo, la palabra de Dios incondicional
no puede ser revocada.
1 Samuel 2:30
Por tanto, el SEÑOR,
Dios de Israel, declara: "Ciertamente yo había dicho que tu casa y la casa
de tu padre andarían delante de mí para siempre"; pero ahora el SEÑOR
declara: "Lejos esté esto de mí, porque yo honraré a los que me honran, y
los que me menosprecian serán tenidos en poco.
Las palabras
condicionales de Dios están sujetas a cambio como respuesta a alguna acción del
hombre, de ahí que la Biblia que dice que Dios se arrepintió.
Por ejemplo, la
siguiente cita es una declaración que se refiere a la firmeza de Dios en su
Palabra de la cual no hay arrepentimiento:
Números 23:19
Dios no es hombre,
para que mienta, ni hijo de hombre, para que se arrepienta. ¿Lo ha dicho El, y
no lo hará?, ¿ha hablado, y no lo cumplirá?
La siguiente
palabra, sin embargo, nos muestra el aspecto condicional de la palabra de Dios
de la cual Dios se arrepiente de algo que habló que iba a hacer:
Jeremías 26:19
¿Acaso lo mataron Ezequías, rey de Judá,
y todo Judá? ¿No temió a Jehová y
oró en presencia de Jehová, y Jehová se
arrepintió del mal que había hablado contra ellos? ¿Haremos,
pues, nosotros un mal tan grande
contra nosotros mismos?
¿Qué es la Soberanía de Dios?
Lo cierto es que la
doctrina de la soberanía de Dios no significa que Dios no escucha la oración de
sus hijos.
Ningún estudioso
fiel y responsable de la Escritura, por mucho que crea en la soberanía divina,
puede haber enseñado jamás tal error.
Se suele decir que
Dios no solamente establece el fin sino también los medios para ese fin y uno
de esos medios tan importantes son la oración de sus hijos.
Por lo tanto, la
gente ora porque Dios ha establecido que por medio de sus oraciones, se ha de
cumplir el propósito divino tanto en ellos como en otras personas. .
Dios escucha la oración
de sus hijos y la única excepción que la Biblia pone a la oración para que esta
sea escuchado es que sea hecha conforme a sus voluntad, de acuerdo a lo que
declara en su propia palabra.
Y esta es la
confianza que tenemos en el, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad,
el nos oye. 1 Juan 5:14
Por lo tanto si Dios
no contesta es porque simplemente no va de acuerdo a Su buen propósito y
voluntad para nosotros, aunque no lo veas de inmediato, Dios sabe mucho más y
solo sabe lo mejor que te conviene.
Tome como un vivo ejemplo
lo que te piden tus propios hijos, no
siempre le daras a ellos lo que te piden, no porque que deseas hacer oído sordo
a lo que te están hablando, sino porque sabes que es lo mejor para ellos aunque
a ellos le parezca lo contrario.
¿Cuántas veces has
dicho no a tus hijos a algo que te han pedido porque sabes que no lo va ha ser
bien? Hay momentos en que debemos decir no a nuestros hijos por el bienestar de
ellos mismos.
Cuando las
peticiones van conforme a su voluntad y de acuerdo a lo que es bueno y
beneficioso para tu vida, Dios te escucha y te concede los deseos de tu corazón.
La Biblia te
presenta y revela a Dios como un padre
que contesta los deseos del corazón de sus hijos:
deléitate así mismo
en Jehová y el te concederá los deseos de tu corazón Salmos 37:4.
El mismo Jesús dijo
lo siguiente:
Mateo 7:7-11
Pedid, y se os dará;
buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; y
el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. ¿O qué hombre hay entre
vosotros que si su hijo le pide pan, le dará una piedra, o si le pide un pescado,
le dará una serpiente? Pues si vosotros,
siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro
Padre que está en los cielos dará cosas buenas a los que le piden?
¿Cuál es entonces la doctrina bíblica de la soberanía de
Dios?
El diccionario
bíblico define la soberanía de Dios de la siguiente manera:
Su derecho absoluto a hacer todas las cosas de acuerdo a
su propio anhelo o voluntad.
Otra definición de soberanía es esta: Ser soberano es
poseer suprema autoridad y poder de tal manera que uno está en total control y
puede hacer todo cuanto desea.
Finalmente la soberanía de Dios es presentada en tres categorías
y señala que implica por lo menos tres aspectos:
1. Propiedad
– Todas las cosas son de Dios, toda la creación, nada de lo que existe está
fuera de su posesión.
2. Autoridad
– Dios tiene el derecho absoluto de imponer Su voluntad en sus criaturas. Sin
embargo, su voluntad no es caprichosa, sino que está en línea con Su naturaleza
la cual es perfectamente santa y justa.
3. Control –
Nada ocurre que esté fuera de la voluntad de Dios, El es el máster de todo lo
que pasa.
La soberanía de Dios
es más que algo simplemente teórico, es algo real. Cuando tu oras a Dios lo
haces porque sabes que El en realidad intervendrá para resolver tu problema y
que no solo puede sino que tiene el poder para hacerlo.
Dios tiene por lo
tanto en su soberania propiedad,
autoridad y control de todas las cosas,
por eso podemos orar a Él y confiar plenamente en El.
Solamente cuando
reconoces la soberanía de Dios sobre todas las cosas, puedes orar confiadamente
delante de su presencia sabiendo que estas acercándote El entendiendo que solo
El está por encima de todas las cosas y tiene control absoluto de todo.
Cuan importante es
tener un conocimiento correcto acerca de la soberanía de Dios el mejor
incentivo y la mejor guía para una vida de oración:
2 Crónicas 14:11
Entonces Asa invocó
al SEÑOR su Dios, y dijo: SEÑOR, no hay nadie más que tú para ayudar en la
batalla entre el poderoso y los que no tienen fuerza; ayúdanos, oh SEÑOR Dios
nuestro, porque en ti nos apoyamos y en tu nombre hemos venido contra esta
multitud. Oh SEÑOR, tú eres nuestro Dios; que no prevalezca hombre alguno
contra ti.
Hebreos 11:6
Y sin fe es
imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea
que El existe, y que es galardonador de los que le buscan.
La Biblia dice que
Dios no solamente tiene control sobre la naturaleza sino también que controla
la voluntad del hombre para llevar a cabo sus planes, librar a sus hijos y
glorificar su nombre.
La Biblia te da
ejemplo impactantes y vivos acerca de todo esto, por ejemplo esta la oración que hizo Josafat,
rey de Judá.
La única razón por
la que este rey pudo venir ante Dios en oración es porque reconocía que Él era
soberano y que verdaderamente era el único que podía librarle de mal que venía
sobre él y por eso, en su oración, tomaba tiempo para nombrar las hazañas y portentos
que Dios había hecho en el pasado.
La razón por la que
él podía confiar en Dios es porque estaba seguro que había dominado
poderosamente en situaciones anteriores y ahora podía seguir haciendo.
Leamos la oración de
Josafat:
2 Crónicas 20:5-11
Entonces Josafat se
puso en pie en la asamblea de Judá y de Jerusalén, en la casa del SEÑOR,
delante del atrio nuevo, 6 y dijo: Oh
SEÑOR, Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios en los cielos? ¿Y no gobiernas
tú sobre todos los reinos de las naciones? En tu mano hay poder y fortaleza y
no hay quien pueda resistirte. 7 ¿No
fuiste tú, oh Dios nuestro, el que echaste a los habitantes de esta tierra
delante de tu pueblo Israel, y la diste para siempre a la descendencia de tu
amigo Abraham? Y han habitado en ella,
y allí te han edificado un santuario a tu nombre, diciendo: "Si viene mal sobre nosotros, espada,
juicio, pestilencia o hambre, nos presentaremos delante de esta casa y delante
de ti (porque tu nombre está en esta casa), y clamaremos a ti en nuestra
angustia, y tú oirás y nos salvarás." Y ahora, he aquí, los hijos de Amón y de Moab
y del monte Seir, a quienes no permitiste que Israel invadiera cuando salió de
la tierra de Egipto (por lo cual se apartaron de ellos y no los destruyeron), mira
cómo nos pagan, viniendo a echarnos de tu posesión, la que nos diste en
heredad.
La confianza de
Josafat en Dios estaba fundamentada precisamente en la soberanía, gobierno o control absoluto, que Él tiene sobre
todos los reinos de las naciones y porque en Su
mano hay poder y fortaleza, por lo tanto no hay quien pueda resistirle.
La soberanía
absoluta de Dios no es razón para huir de la oración sino que es la misma base
sobre la cual se fundamenta nuestra confianza para la oración.
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